PINCELADAS OCULTAS EN SAN PEDRO ARREPENTIDO

17/10/2019


 

 

En el año 2016, el Museo de Belas Artes de A Coruña encarga a la Universidad de Santiago de Compostela (USC) un estudio de dos bienes culturales de sus fondos que se encontraban en proceso de restauración: un óleo barroco sobre lienzo y una escultura en madera policromada que representa a San Benito. El estudio concluyó con un informe emitido por la Unidade de Arqueometría (RIAIDT) de la USC.

La exposición monográfica Pinceladas ocultas muestra el proceso de restauración de uno de esos bienes, la obra titulada "Arrepentimiento de San Pedro" de Francisco Collantes, pintor español barroco del siglo XVII. A raíz de un examen radiográfico llevado a cabo durante la restauración de la obra se reveló la existencia de una diferente iconografía debajo de la que se percibe a simple vista.

Con la ayuda de diversos óleos, grabados y documentación original relacionada con su temática y contexto histórico, así como fotografías y vídeos, Pinceladas ocultas explica al público visitante el proceso de restauración al que fue sometida esta obra de Collantes, así como el estudio iconográfico de la misma, tanto de la representación actualmente visible como de la oculta.

 

 

Gracias a la colaboración con la RIAIDT (Red de Infraestructuras de Apoyo a la Investigación y al Desarrollo Tecnológico) y con la Fundación Rof Codina, fue posible el descubrimiento iconográfico bajo la capa visible de pintura. Este hecho, junto con la labor de documentación y restauración del equipo técnico del museo, supuso el germen de este interesante proyecto expositivo con el que se muestra el resultado final mediante contenidos didácticos e ilustrativos para conocimiento y deleite de todos aquellos que se acerquen a visitarla.

Tanto dicho equipo, como expertos de la USC, han planteado la hipótesis de que la figura del santo, originalmente, representara la imagen de otro que, como San Pedro arrepentido, tuvo gran difusión en el arte barroco: San Jerónimo en su faceta de penitente, pero invocando también en este caso su labor intelectual como escritor religioso y traductor de los textos bíblicos, pues aparte de los rasgos eremitas como la barba larga, se aprecia que aparece ladeado hacia su izquierda y sobre un grueso volumen.  

Como apoyo a la explicación iconográfica del cuadro y de la iconografía oculta, se exponen un ejemplar de la Biblia Políglota complutense perteneciente a la colección del Museo de Belas Artes de A Coruña y obras traídas de la Biblioteca Nacional de España (BNE) y del Museo Nacional del Prado, que aporta el óleo sobre lienzo "Las lágrimas de San Pedro" (imagen superior), del siglo XVII (anónimo, copia de José de Ribera), y el óleo sobre tabla "San Jerónimo" (imagen inferior), del siglo XVI, (copia de Marinus van Reymerswaele).

 

 

El "Arrepentimiento de San Pedro" es un óleo sobre lienzo datado entre 1630 y 1656. Sus medidas son 107 x 170,5 cm sin marco y 188 x 130 x 10 cm con marco. Forma parte de la colección estable del Museo de Belas Artes de A Coruña. Fue donado a esta institución por el escritor y poeta Ramón Goy de Silva en 1951. El cuadro tuvo al menos un proceso de restauración anterior a su ingreso en el Museo en el referido año.

Su anterior propietario, Francisco Pérez Asencio, lo prestó para que figurase en la Exposición Iberoamericana de 1929 celebrada en Sevilla y la autoría aportada por el propietario se asignaba entonces a Diego Velázquez, si bien años más tarde quedará argumentada la inconsistencia de esta particularidad. Pérez Sánchez atribuyó la obra a Francisco Collantes, destacando los aspectos compositivos y estilísticos que son distintivos de su expresión artística, en concreto el paisaje en el que se inserta la figura del santo. Igualmente, el lienzo se clasifica como de Collantes en una investigación posterior en la que también intervino Angulo Íñiguez.

Dicha obra es una muestra de las características principales de la pintura de Collantes, donde se manifiesta su formación tenebrista. La concepción de la figura de San Pedro remite al modelo creado por Ribera en el siglo XVII para representar la aflicción del santo y su actitud penitencial, el rostro alzado y las manos entrelazadas. Con la cabeza calva y la barba corta que serán desde entonces rasgos habituales de su iconografía.

 

 

Hasta el 15 de diciembre de 2019 en la Sala 1 del Museo de Belas Artes da Coruña (Rúa Zalaeta s/n, A Coruña). Horarios: martes a viernes, de 10:00 a 20:00 horas; sábados de 10:00 a 14:00 y de 16:30 a 20:00 horas; domingos, de 10:00 a 14:00 horas; lunes y días festivos, cerrado.

 

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