En el año 1977, con motivo de una reparación efectuada a la talla, el escultor, imaginero y restaurador cordobés Miguel Arjona Navarro dio un informe previo en el que afirmaba que se trataba de una escultura gótica del siglo XIII, completa en talla, que posteriormente fue vestida para adaptarla a los gustos del XVI; para ello, se mutiló el plegado de su hechura, conservando parte del mismo y la policromía subsistente.

Según establece también dicho estudio, la hierática imagen, Patrona de Cabra (Córdoba), no da señales de haber tenido en origen el Niño Jesús. El que lleva en la actualidad data del siglo XVIII.

La gran devoción que se le profesa a esta obra mariana justifica el considerable número de copias que existen de la misma. Algunas de las últimas han sido realizadas por jóvenes artistas cordobeses, caso de Adrián Valverde Cantero o Pedro Antonio Fernández Valcárcel, quienes han procurado reproducir su peculiar fisonomía.

Cuando a las 4 de esta tarde, las campanas de su santuario toquen en repique gozoso, la Patrona de los egabrenses partirá hasta su ciudad. Este año llevará un manto de color verde manzana, brocado en oro, sobre sus andas de viaje, adornadas en sus esquinas con cuatro mazos de nardos. Unos 12 km separan la ermita de la localidad. Sus devotos egabrenses y los de hermandades filiales como Sevilla, Málaga, Madrid o Barcelona -unas 10.000 personas la acompañaron en 2008, número que se incrementará este año, al ser la bajada en viernes-, se congregarán alrededor de la venerada imagen mariana, popularmente conocida como Divina Serrana.

Tras un recorrido de cuatro horas, la Virgen llega al barrio que lleva su nombre y es trasladada hasta la Parroquia de San Francisco y San Rodrigo. Sobre las 22:30 horas, realizará la entrada triunfal en la ciudad, en los arcos de la antigua Calle Baena, donde le será impuesta, por parte del ayuntamiento egabrense, la vara de Alcaldesa Perpetua de la Ciudad (título impuesto en 1958).

Ya en la ciudad de Cabra, tras la Virgen de la Sierra irá una larga comitiva (que alcanza más de 1 km de longitud) formada por cientos de caballistas y casi un centenar de carrozas de papel.