LA BICHIEROGRAFÍA DE GIOVANNI MAGGI

Pilar Barrio


 

 

En el año 1604, el pintor, dibujante y grabador romano Giovanni Maggi, con el deseo de alcanzar el reconocimiento y el trato de favor de altos y poderosos mandatarios, dedicó al Cardenal del Monte, embajador en Roma del Gran Duque de Toscana, esta singular colección bautizada con el nombre de Bichierografía.

La elección del cardenal como destinatario de su obra no fue un acto fortuito: el representante del Gran Duque Ferdinando de Medici era, además de un hombre políticamente influyente, un apasionado, conocedor y prolífico coleccionista de todo tipo de obras de arte: pintura, antigüedades, piedras preciosas, vasos, copas y cálices.

En el variadísimo y a la vez armónico repertorio de piezas que componen dicha Bichierografía, queda patente la imaginación, fantasía y sentido del humor de Giovanni Maggi (1566-1618), un personaje con un carácter tan alegre e ingenioso como extravagante para su época.

 

 

Heredero de una época floreciente artística y culturalmente, el polifacético Maggi encontró la inspiración para esta obra en los lugares más dispares. Los motivos naturalistas, las fuentes para plazas y jardines que tantas veces dibujó, las letras del abecedario, diversos instrumentos musicales, vestimentas exóticas o antiguas, animales o flores fueron transformados por la tremenda inventiva, la estética surrealista y el estilo sensual de este artista.

Dichas cualidades volvieron a ver la luz en una edición, limitada y numerada, que presentó Gianfranco Pampaloni en el año 1994. Pampaloni, descendiente de una familia de plateros florentinos, artista atípico y militante contra las formas obvias y establecidas, rescató del olvido la sugerente colección de copas y cálices del siglo XVII.

130 piezas de plata, con una historia fascinante que Pampaloni reprodujo a partir de los dibujos e indicaciones de Maggi, conservados en el Palacio Uffizi y en la Biblioteca Nacional de Florencia. Para ello, el orfebre siguió con total fidelidad las técnicas y procedimientos manuales que se empleaban por aquel entonces.

 

Volver          Principal

www.lahornacina.com